La Gran Decisión

No es justo que el Real Madrid se llevase los tres puntos de Mestalla. El partido, bien planteado por el técnico valencianista y jugado muy seriamente por la totalidad del equipo debía haber sido suficiente para doblegar al rácano ejército de Fabio Capello. Pero ayer faltó pegada porque faltaban dos delanteros que sorprendentemente estaban en la convocatoria pese a estar lesionados e incluso uno de ellos, David Villa, fue alineado en el equipo inicial y… el tercero en discordia , Francesco Tavano, tiene sobre su cabeza la maldición de haber sido el elegido de Amedeo Carboni.
Honra a David Villa su ímpetu y su esfuerzo para saltar al terreno de juego ayer tarde para enfrentarse al Real Madrid y entiendo perfectamente el interés por parte del entrenador por que el asturiano apuntase a la portería de Casillas. Incluso se puede, aunque sea difícil, entender que también el médico se quisiera sumar a la ‘fiesta del guaje’. Pero , fiestas y deseos al margen creo que el único que queda liberado es precisamente quien se ha querido hacer responsable de la decisión. El hecho de que Villa haya querido liberar al técnico y al médico le honra todavía más si cabe pero ante el ímpetu del futbolista debe prevalecer la frialdad de Quique y del Dr. Giner. Si Quique tenía el OK del galeno es evidente que el Doctor ha patinado y si no contaba con él es el entrenador quien lo ha hecho.
El jugador asturiano lleva demasiados minutos en sus piernas desde que empezó la temporada entre el VCF y la Selección Nacional , resulta difícil de entender el que se le forzara en el encuentro ante Olympiakos y raro es en partido en el que al ser sustituido rápidamente no se le aplica hielo porque se encuentra al límite.
Con las cosas de comer no se juega y David es uno de los que trae a casa el plato de caliente en forma de goles.