En vísperas de la Junta General de Accionistas en la que el Valencia CF pretende prescindir de Manuel Llorente y Joaquín Vidal Gaya como integrantes del Consejo de Administración ( Vicente Soriano ha arrastrado la dignidad que nunca tuvo lo necesario para salvar el pescuezo pero no pinta absolutamente nada) pongo la mirada en la Junta General que se celebrará dentro de un año más o menos. Y miro a largo plazo porque será entonces cuando se vea reflejado en las cuentas valencianistas una partida más o menos importante en el Capítulo “PERSONAL NO DEPORTIVO”.
Espero que algunos socios que se han significado repetidamente por su interés pormenorizado a la hora de examinar los números del Club tenga la sana curiosidad de preguntar el porqué de dicho incremento, desconozco si la respuesta que se le facilitará al curioso accionista será la verdadera o la políticamente correcta. La verdadera ya se la puedo ir adelantando yo: dicho capítulo se verá engordado en el gasto por los 200 millones de pesetas que ha cobrado como indemnización el ex consejero delegado Manuel Llorente fruto de una curiosa maniobra que el propio Llorente hizo días antes de cerrarse la venta de acciones de Paco Roig a la familia Soler: Como bajaban las aguas turbias el Consejero Delegado quiso entonces cubrirse el riñón por si los Soler barruntaban el prescindir de sus servicios y aplicó a su contrato un costoso blindaje.
Ah… Llorente no sólo blindó su contrato cuando vio venir los cambios en el Valencia CF ya que en la misma “pirula” quedaron blindados y bien blindados los contratos de sus fieles esbirros: Jordi Bruixola (Director de Comunicación), Javier Gómez (Director Financiero) y Víctor Oñate (Director Comercial).
Y no es que sea una maniobra ilegal puesto que tenía atribuciones para hacerlo, no en vano era el Presidente de facto de la entidad, pero no me dirán que no suena a golfada con mayúsculas.
Espero que algunos socios que se han significado repetidamente por su interés pormenorizado a la hora de examinar los números del Club tenga la sana curiosidad de preguntar el porqué de dicho incremento, desconozco si la respuesta que se le facilitará al curioso accionista será la verdadera o la políticamente correcta. La verdadera ya se la puedo ir adelantando yo: dicho capítulo se verá engordado en el gasto por los 200 millones de pesetas que ha cobrado como indemnización el ex consejero delegado Manuel Llorente fruto de una curiosa maniobra que el propio Llorente hizo días antes de cerrarse la venta de acciones de Paco Roig a la familia Soler: Como bajaban las aguas turbias el Consejero Delegado quiso entonces cubrirse el riñón por si los Soler barruntaban el prescindir de sus servicios y aplicó a su contrato un costoso blindaje.
Ah… Llorente no sólo blindó su contrato cuando vio venir los cambios en el Valencia CF ya que en la misma “pirula” quedaron blindados y bien blindados los contratos de sus fieles esbirros: Jordi Bruixola (Director de Comunicación), Javier Gómez (Director Financiero) y Víctor Oñate (Director Comercial).
Y no es que sea una maniobra ilegal puesto que tenía atribuciones para hacerlo, no en vano era el Presidente de facto de la entidad, pero no me dirán que no suena a golfada con mayúsculas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario